Llevo un par de semanas disfrutando como un enano
con los entrenos que estoy haciendo. Probablemente sea por el hecho de que
salgo a correr, sin más pretensiones que las de disfrutar mientras corro. A lo
mejor tiene que ver el hecho de que en este tiempo ha llovido mucho en sentido estricto.
EL sábado hice un rodaje de 18 kilómetros por
Gijón a 5:08 y 144ppm acompañado gran
parte del camino por la lluvia. ¿Truco? Sí, algo. Al fin y al cabo estaba
corriendo a nivel del mar y por un recorrido plano en su práctica totalidad. Por
cierto, mi FCMax es de 162ppm, de ahí que parezca que vaya sobrado tanto en
los rodajes como en mis sesiones en el umbral anaeróbico (a 150-152ppm).
El jueves pasado igual, llovía cuando salí,
después paró un poco y finalmente empezó a jarrear al final. De perdidos al
río, “from lost to the river”. Como dicen los pingüinos de Madagascar, “sonreíd
y saludad”, “cucos y coquetos”. Así que cabeza bien alta, sacando pecho y gracilidad.
Me faltó ponerme a cantar el
“Ardor guerrero” que no me sé porque uno hizo la mili en el arma de Ingenieros
para cuyos integrantes los infantes eran carne de cañón (paradójico, por otra
parte, cuando los zapadores son igualmente soldados valerosos del arma de
Ingenieros). Llegué de barro hasta arriba, literalmente. Las zapatillas,
blancas cuando las compré, tienen esa pátina que les confiere el viento y el
barro asienta.
Ayer hacía
un tiempo espectacular. No más de 10ºC, sin viento y ninguna nube y decidí irme
al JC1 en bici. Al final me salieron 21
kms a 22 kmh puerta a puerta. Qué pena que tuviese que volver, porque me he
quedado con ganas de más. Hacía tiempo que no iba en bici con fines deportivos,
y la verdad, tenía de ganas de meter desarrollos largos con cadencias altas, ya
que el ciclismo urbano no permite apenas este tipo de caprichos. El problema es
que para “enterarse” del ejercicio uno necesita un tiempo precioso, ya que he
estado algo más de 53 minutos y las pulsaciones se han quedado en 122ppm.
¿Carreras a la vista? Ninguna la verdad. Bueno,
miento, sí que hay una, pero esta vez voy de espectador cámara en mano. Y es
que el domingo los enanos tienen carrera en el Parque del Oeste. Se estrenan en
la ultradistancia de los 300 y 400 metros. ¿Necesitarán gel de hidratos? Eso es
para los parchosos de los padres, que nos da por correr y correr sin parar.
Bien, bien que ya tengan ganas de participar en carreras. Algo de "culpa" tendrán los padres digo yo... jeje
ResponderEliminarprobablemente. En "La Bola de Cristal" salía eso de éste lee, éste no lee". Si tú lees, ellos leen.
EliminarCorrer por la playa es muy facil, pero cuidado que la sudoracion es excesiva dada la humedad y nos podemos quedar secos, aun asi, para correr 18 km a 5 min... hay q estar en forma y tu estas "cañon".
ResponderEliminarYo salgo llueva o no, pero si me pilla enmedio me digo a mi mismo, una vez empezado... se acaba, total que mas me da mojarme un poquito que un muchito?
Asi que los enanos se estrenan? Yo lo q te aconsejaria tras esa distancia es un buen "recovery" q ahora esta muy de moda a base de bocata de calamares y una buena coca cola, seguro q se relamen los jodios.
Es bueno inculcar a los pequeños los valores del deporte y si lo hacen gustosamente, mejor q mejor.
Un abrazo Thunder!
es su segunda vez. Ya estuvieron en la Proniño y les gustó mucho. ¿CocaCola? mejor un Aquarius, lo q les faltaba, cafeína.
EliminarHay pocas cosas tan duras como una unidad de infantería ligera, si son zapadores aun mas duro. Hacerte 18 km a 5' es una pasada;
ResponderEliminar5:08. 8 segundos s enota, y el hecho de rodar en llano más aún. ¿Más duras? la 101 Aerotransportada (paracas) combatió en las Ardenas sin apenas equipamento de INvierno contra la Infantería y Caballerías Mecanizadas de la Wermacht bien pertrechadas. Acojonante "Hermanos de Sangre"
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