viernes, 11 de julio de 2014

Que viene, que viene... el verano

Supongo que a todo el mundo que trabaja le pasa lo mismo con las vacaciones, que cuando están ahí cerca no terminan de llegar.

Ahora que queda poco estoy más en modo vacaciones que otra cosa. Hay veces que casi salgo en chanclas. Cuando el jefe me da los buenos días casi le pido una jarra helada de cerveza, un espeto y morralla (en Málaga hay que pedir morralla para que te pongan chanquetes o, más propiamente, pez plata). El MP3, muy listo él, ya no pone a la Creedence y su “Have you ever seen the rain” sino que selecciona insistentemente grandes canciones (melodía de ironía por favor) como el La, la,la Leego (Chaquira), Ole Ola (JLo, Pitbull).

Por cierto, hablando de lluvia, de menuda chupa me libré el jueves. Mirando por la ventana a mediodía vi que hacia el este estaba claro, así que cogí el petate de emergencia (ese equipamento básico que tengo en el curro por si acaso) y me fui a Valdelatas. En la salida me encontré con un compañero que iba a hacer el mismo recorrido y fuimos juntos. Tranquilos, sin pausa, un poco más rápido él y lento yo, andando en un par de cuestas como entrenamiento de los famosos Ca-Cos.

El camino estaba perfecto. Ni duro como estos días de atrás ni blando como en pleno invierno. Vamos, perfecto. Además, con toda la lluvia, el campo olía muchísimo a campo; menuda perogrullada, pero a 9-10 minutos corriendo desde una oficina en Madrid es más un lujo que una evidencia. Habiendo llovido tanto y con expectativas de seguir lloviendo no había ni dios por el monte. Y lo disfruté muchísimo. Nos cruzamos con un zorro, un conejo y algunos pájaras de buen tamaño que mi ignorancia y miopía me impidieron reconocer.

Cuando coronamos la valla que da a la salida de Alcobendas y yendo en paralelo a la vía de servicio de la carretera que va a Alcobendas (donde está el Decartón) vemos hacia el este una nube como la de Mordor o más negra pero sin el ojo que todo lo ve. Volviendo empiezan a caer algunas gotas y apretamos algo más; total, el trabajo Ca-Co ya estaba hecho y nos podíamos permitir alegrías como ir a 4:30.


Se preparaba una buena granizada... hay que darse prisa


A eso de las 15:15 dejamos de correr y, al salir del vestuario, se desató una granizada tremenda. Granizos como cojinetes modelo “borroka eguna” que luego me enteré que provocaron el corte momentáneo de la M40 con el consiguiente atasco. Y es que no hay nada como ir en bici para llegar pronto a cualquier sitio.

La salida del domingo la tuve que abortar y es que llovía tela marinera cuando tenía que salir. Además no tenía ni ropa adecuada y, arriba en la montaña, había que intuir su forma porque estaba muy cubierta. Dejo, pues, sólo un entrenamiento más para Somiedo que se me irá a 25 kms. Confío en que con ese entrenamiento y las cervezas del chiringuito sea suficiente para terminar dignamente. Mejor dicho, para terminar.

Me reconforta saber que mi Sensei particular ha terminado el GTP por delante de muchos profesionales andando en todas las subidas (y corriendo como un gamo en las bajadas). Ah, me ha aconsejado ir con camiseta de compresión, y yo, obediente como pocos, me he comprado una con la que se me nota toda la tableta de chocolate... y el melón, y el paquete de colacao porque de sugerente tienen poco estas camisetas, cagüenlaputa, cuánta pasta se ahorraría Seguridad Social en Rayos X con una simple camiseta de compresión.


En cuanto la pinta de cara a la playa, como cualquier otro runner, parezco una orca: cabeza, pescuezo, piernas hasta el tobillo y mangas negras como los cojones de un grillo. Espalda, pecho, piernas hasta donde la malla deja de existir y tobillo blancos como la teta de una monja. 


runner buceando después de un año corriendo en manga y mallas cortas

10 comentarios:

  1. jajaja nada como echarse unas risas un viernes a estas horas. y es que es verdad, vaya pintas que llevamos en el cuerpo entre blancos y morenos...
    la camiseta de compresión pa que sea buena que no te permita ni respirar :p
    lo mejor de todo es que tu sensei lleva razón, por lo menos mi fisio coincide: apretadito se corre mejor.
    mucha suerte con esos 25 kilometrillos,
    :-)

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    1. antes muerto q sencillo! el estreno ha sido satisfactorio.

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  2. Con ese entreno que te falta de 25 kms vas perfecto, pero sobretodo vas sobrado con las cervezas del chiringuito. Que no falten eh, a ver si luego la camiseta no aprieta lo suficiente.

    Jo que pena me esta dando perderme el fiestorro de Somiedo.

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    1. es mi arma secreto. Una Cruzcampo bien fresquita en el chiringuito Rafael (entre Torremolinos y Benalmádena) con un espeto y que se quiten todos los sherpas

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  3. Por suerte no se me nota tanto una orca :-) mi tono de piel me sirve de camuflaje! :-)
    Lo de las camisetas técnicas es el origen del postureo! :-) jajja si es que nos no mienten!
    A disfrutar de esas cervecitas que luego se nos pasa el verano y entremos la camisa técnica tiene que entrar! :-)
    bss
    Tania

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    1. "los niños, los borrachos y los leggins no mienten-..." y las camisetas de compresión.

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  4. ¡Menuda estampa en la playa! Y, sí, las camisetas de compresión están haciendo mucho daño... jajaja
    A disfrutar de Somiedo, de las cervecitas y, si te sobra tiempo, de la carrera.

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    1. Es q además en la playa se ve cada cosa... el tamaño del cuerpo es inversamente proporcional al del tanga/turbo... menudos cuerpos serranos con tanga de leopardo se ven por ahí con un bocata de panceta en la mano gritando "¡yosua, q se te ha olvidao el postreeeeeeeee!"

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  5. Lo del moreno "agroman" ya es una constante en mi vida. Y lo de las prendas técnicas, utilizan su propaganda engañosa, y deberíamos devolverlas, no quedan como en las fotos, salvo excepciones, entre las cuales no me encuentro.

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