viernes, 28 de enero de 2011

Operación bikini

Ahora que nos alejamos de esas fechas tan entrañables, en pleno invierno, y con el verano lejos, uno de los sempiternos propósitos de año nuevo, es la Operación Bikini (bueno, y en primavera, y después del verano…), en el que la cuchara se nos presenta injustamente como una enemiga a la que combatir por su efecto sobre las cartucheras. Desgraciadamente para ellos, muchos renuncian a un buen cocido a cambio de un delicioso plato de forraje con su rúcula, su lechuga fashion, su queso fresco y aderezado con vinagre balsámico de Módena (hay que poner un punto de glamour a la comida vacuna) porque “engorda”.

Para empezar, una obviedad. En invierno hace más frío que en verano. Otra obviedad: nuestro cuerpo, salvo enfermedad, está a la misma temperatura (si cambiase con la temperatura ambiental seríamos el Lagarto Juancho). ”.

Si te mueves en un ambiente isotérmico (es decir, con calefacción alta, a 23º, igual que en verano) y no sales a la calle nada más que para fumar y/o ir al coche para ir de casa al curro (el que lo tenga), la verdad, la diferencia con el verano va a ser poca, por lo que tendrás que seguir comiendo tus ricas ensaladas veraniegas.

Si, por el contrario, practicas algún deporte o actividad al aire libre (por ejemplo, andar), convenientemente abrigado el gasto calórico se dispara, ¿hasta qué nivel? No hay una relación directa, pero tanto más cuanto más frío haga. Pero, ojo, esta afirmación ha de ser completada con la coletilla de “estando convenientemente abrigado”.

En condiciones normales, necesitamos más calorías simplemente para mantenernos en funcionamiento. ¿cuántas? Depende de muchos factores (peso, temperatura, actividad e intensidad que se realice…), pero en términos muy generales se queman unas 60 calorías por kilómetro, por lo que para quemar ese arroz con leche que te aprietas sin querer te tienes que pegar una carrerita de 7-8 kilómetros a un ritmo troticochinero, así de crudo. Por cierto, un plato de cocido, pringá y rioja incluidos, tiene las mismas calorías que ese arroz con leche. Tú mismo, cuestión de preferencias, repetir cocido o postre.

Es decir, que no debemos salir a correr con la camisa del Tercio Alejandro Farnesio a 0º. Si la protección térmica es la adecuada, la sudoración se reduce al mínimo en comparación al verano, con lo que apenas nos deshidratamos; la pérdida de sales, por tanto, se ralentiza, por lo que la eficiencia del entreno crece: en definitiva, podemos meterle más caña y tardamos más en cansarnos.

martes, 25 de enero de 2011

Si en FITUR regalaran mierda, la gente se daría hostias por ella

El domingo pasado, como tantos otros, me fui a hacer un rodaje de quince kilómetros tranquilitos. Alertado por lo que decían en los telediarios con las alertas naranjas y demás colores me puse una capa más encima, además de los guantes y una braga. A pesar de que pensé no podía ser para tanto (total, la temperatura de -2ºC sólo era cuatro grados inferior a la del domingo anterior, 2ºC), me acojoné un poco y me abrigué un poco más; al fin y al cabo el domingo ése eché en falta los guantes. ¿Frío? Pues sí, hacía frío, pero era un frío seco, que se lleva bien... si es que no hay viento. Los estanques estaban congelados, sí, los más grandes con icebergs, pero la hierba no estaba blanca, ni resbalaba en las cuestas asfaltadas.

El anunciado Armageddon Polar hizo que el JC1 estuviese vacío, salvo por los pocos runners inasequibles al desaliento, los cuatro pirados de las cometas y los maquetistas de coches. Eso sí, el aparcamiento estaba lleno ¿? Fitur. El día anterior nos quedamos flipaos en casa con gente que salía en la tele que iba a pillar lo que le diesen, con maletas de mano (troleys para los pedantes) llevadas con el único fin de llenarlas de folletos que nunca leerán y que el año que viene tirarán para meter otros nuevos en Fitur 2012. Gente peleándose por camisetas de tres leuros de “Amo Bolivia”, “Visit Croatia” o sombreros de paja que ni en el mercata tendrían salida. Pero claro, era gratis, y es que si pusiesen un barreño de mierda y enchufasen un ventilador la gente se daría de hostias por ser regados por mierda de Francia (mierda con glamour, oh, la grandeur!) o del país que la repartiese; total, es gratis ¿no?.
Pues eso, que vi a gente con sus maletas de mano dirigirse al FITUR y comentarios del tipo “¡hay que tener ganas de irse a correr con el frío que hace!” ¿y tú, gilipollas? Hay que tener ganas de meterse en una bulla por una camiseta de mierda que no sirve ni para limpiar los cristales. Ah, que es gratis, se me olvidaba.

En lo meramente deportivo, la salida se fue hasta los 14 kms, a 5:06 y 140 ppm. Está claro que mi par motor está en torno a 5:10/5:15. Me queda ponerme un día a 05:30 a ver a cuántas pulsaciones me pongo durante 15-20 kms, pero para eso hace falta tiempo; mejor dicho, tener más tiempo.

martes, 18 de enero de 2011

Series en el Juan Carlos I

Siguiendo con lo propuesto a principios de año (qué lejos queda ya, puta rutina, y éso que sólo han pasado 18 días), acabo de terminar mi segunda sesión anual de series de mil metros, a una media de 3:56, tres segundos menos que la anterior, pero tiene truco. No las he he hecho en Villarrosa, lugar habitual, sino en el JC1. La diferencia está en el perfil del recorrido, ya que en Villarrosa hay un par de cuestas que al final te pasan factura, o eso creo, ya que en una semana no se mejoran tres segundos. Hombre, si tienes el teléfono de la camella de Palencia y te pasa unas pirulas a lo mejor, pero yo ya tomo mis pirulas de chuletillas cordero con un tercio ("u dos") de Mahou y me va estupendo, EPO puro y duro.

A diferencia de otros días, hoy he ido en bici (8 kms entre ida y vuelta), más 4 series de un kilómetro. Esta vez, los tiempos han sido más homogéneos y progresivos, desde 4:00 hasta 3:54, siendo las mejores que haya hecho hasta ahora salvo la primera repetición (tampoco es que sea muy difícil, ya que el año pasado hice seis sesiones y éste dos).

El sitio es mucho mejor que Villarrosa, ya que es prácticamente plano, sin apenas curvas y de tierra compacta. Además no es un circuito cerrado, sino un tramo de camino seguido que va al lado de una ría/canal con sus patitos y piraguas, con amplias vistas sobre la Sierra de Madrí y la ciudad. El problema es que para veinte minutos (descansos incluidos) se pierde casi una hora, con lo que lo más probable es que lo alterne con series al lado de casa, que requiere menos logística. Manda huevos que para correr haya que tener prisas, pero es lo que tiene correr a mediodía por no tener otra hora.

lunes, 17 de enero de 2011

Doblete dominguero

Al fin un fin de semana que no llueve. Además hizo bueno para estar en Enero en la Meseta Castellana. El domingo, salida larga. De momento sigo con mis experimentos para adaptar mi ritmo a lo que debería ser una carrera en condiciones con un mínimo de aspiraciones de terminarla. Al final 14,5 kms a 137 ppm, con una media de 5:13 min/km. Eso sí, como el día de antes hizo una mínima de siete grados, salí un poco desabrigado para la ocasión (vamos, que pasé un frío de cojones hasta que entré en calor). Y es que había caído una helada tremenda. Los pajaritos no cantaban (los pobres tenían frío), las nubes no se levantaban (el sol tampoco calentaba a esas horas), pero el aspecto del parque a esas horas era impresionante. Silencio, una luminosidad acrecentada por el hielo aún existente y los olores propios del parque.

Como viene siendo habitual en mis salidas largas, me fui al JC1, pero esta vez en lugar de darle una vuelta perimetral y otra interior me decanté por ir varias veces por todo la orilla de la ría, una senda de un kilómetro casi plano y a esas horas sin nadie, perfecto para hacer series y rodajes rápidos.

Y a media mañana… vuelta al parque con los enanos, bicicletas, pelotas y demás material. El pequeño, con su bici nueva, intenta pedalear aunque no termina de asimilar el concepto del giro completo (y continuo) de los pedales y su efecto en el desplazamiento; pero bueno, al menos se desplazaba a un ritmo considerable para su edad y aguantaba, porque se hizo un par de kilómetros como un campeón.

En cuanto al resto de la semana deportiva, aparte de las series, salida mariconetti de 45 minutos en bici el viernes pasado. O, más que salida, regreso, porque la hice a la salida del curro antes de llegar a casa, con lo que cumplo mis objetivos del año (al menos en su primera semana). Gran duda: ¿Villarrosa para series o esto, para lo cual tendría que coger la bici?. Igual hago la prueba esta semana, a ver qué tal se da.

jueves, 13 de enero de 2011

Series 2011

Ayer conseguí hacer mis primeras series del año, tal y como me había propuesto, y eso que ese ángel malo que todos tenemos en el hombro izquierdo me decía que lo dejáramos para otro día, pero al final el tocapelotas del pepito grillo del hombro derecho ha ganado, y allá que me he ido; ¿influirá que todavía los propósitos son fuertes? ¿tendrá que ver que aún estoy viendo cómo funciona el Garmin? Probablemente, pero para empezar he hecho una serie menos de las previstas, cuatro en lugar de cinco. Teniendo en cuenta que llevaba casi tres meses sin hacer ninguna serie y la media, 3:59, el resultado no está nada mal.

Para empezar, es algo mejor que hace tres meses, dos ó tres segundos; veremos a ver si con cinco series consigo mantenerme por debajo de los cuatro minutos, y es que sigo corriendo mejor la primera serie que el resto, cuando debe ser algo progresivo.

La primera la he corrido en 3:47, cuando debería haberlo hecho en 4:14 y haber ido descendiendo cuatro segundos por vuelta (más o menos), para terminar precisamente en esos 3:47. ¿Motivos para correrla tan “rápido”? primero que, a diferencia de los rodajes, no tengo tanto feedback mental sobre si estoy yendo más o menos rápido. Segundo que aún no domino el pulsómetro nuevo tanto como para llevar una noción sobre la marcha de cómo voy (bueno, “no tenía”, ya que poniéndome a trastear en el descanso de la primera serie vi que se podía seleccionar una vista cualquiera con distancia, tiempo de la vuelta, etc; de hecho en las siguientes tuve más regularidad, desde 3:59 a 4:07). Una vez dominado este aspecto del Garmin, espero poder hacer series más puras por no mediopetar en las primeras.

En cuanto a las pulsaciones (la segunda derivada de la velocidad), he hecho medias crecientes desde 156 a 161, bajando hasta 120 en el minuto y medio de recuperación. Teniendo en cuenta que mi FC máxima es de 163, se puede considerar que el esfuerzo ha sido el máximo, si bien para decir esto no me ha hecho falta ver los resultados del pulsómetro, ya que iba a mi tope mental.

Igual tengo que montarme un post de “Garmin para gilipollas” (vamos, como el menda) nivel Iniciación.

lunes, 10 de enero de 2011

Propósitos de Año Nuevo

No se sabe porqué, pero los seres humanos tenemos la costumbre de, ante el final de año, autosometernos a unos propósitos de enmienda para el año entrante que la mayor parte de las veces no llegan a Carnavales (y este año ni eso, que son en Marzo). Como si las campanadas hiciesen que a uno, de repente, le salgan los abdominales de Ronaldo o un peculiar acento de las Highlands al proponerse "hacer deporte" o "estudiar inglés". Como diría Pelayo "¡Qué tontería!".

En esa línea me he propuesto 4 objetivos, si bien los dos primeros pueden fusionarse.

1.- Tomarme en serio las series. Nada de “la semana que viene”. Nada de eso, fijarme un día a la semana para irme al parque a hacer al menos 4 miles.

2.- Bajar de 41 minutos en un diez mil. En términos de tiempo, son 4:06 min/km. Suena duro, pero si cumplo lo anterior es factible. Total, el último 10.000 que corrí lo hice a 4:14.

3.- Quitarme la mochila que arrastro desde el verano, de dos a cuatro kilos; esto sí que es duro, y es que me cuesta más dejarme una chuletilla de cordero que correr un kilómetro de más.

4.-Coger más la bici. Aparte de la mariconada de venir a trabajar, sustituir uno de los días de carrera por 40/45 minutos de paseo en bici. Mis rodillas me lo agradecerán y me saldrá un culito zumbón que no veas :D.

Dado lo concreto de los mismos, y que no son en absoluto inalcanzables, espero conseguirlos. Dejo para el año que viene lo de terminar un maratón, ya que éste lo voy a tener muy jodido.

¿Qué cuál me costará más? Sin duda alguna, el tercero.

lunes, 3 de enero de 2011

San Silvestre Vallekana, Juan Palomo y Nike

Puede que en el tono de esté post influya el que Nike no sea precisamente santo de mi devoción, sino más bien todo lo contrario. Pero lo que está haciendo con una carrera popular como la San Silvestre Vallekana no tiene nombre, convirtiéndola en un vulgar Juan Palomo, donde los únicos atletas de relumbrón que vayan sean patrocinados casualmente por Nike. Tampoco tiene nombre que en una carrera supuestamente “popular” te soplen 17 leuros por correr sin derecho siquiera a ropero. Tampoco tiene nombre que uno de los favoritos a ganar se despiste por una deficiente señalización. Y encima los cabrones de Oregón se justifican diciendo que cubren gastos. ¿35.000 personas a 17 leuros? Vamos, no me jodas, y encima con otros patrocinadores. Cualquier carrera popular o bien cuesta menos o, costando lo mismo, la corren muchísimos menos corredores, y siguen cubriendo gastos. Al menos la bolsa sería la hostia ¿no? pues no, una camiseta pedorra y a correr, que para éso has venido.

Claro, que si te traes atletas que tú patrocinas y pones unos premios más o menos altos para que ellos se los lleven (y de paso que el aguinaldo se lo paguen los populares y no la marca que le paga), se puede explicar el porqué de que “cubran gastos”. Pero qué listos que son. Pero qué tontos que somos.

Y por último lo de Nuria Fernández, ignorando las preguntas de la Operación Galgo. Dicen que uno es esclavo de lo que dice y dueño de lo que calla (o al revés), pero algunas calladas te hacen esclavo de lo que no dices. SI ya de por sí es sospechoso que en toda tu vida deportiva no hayas tocado pelo con unas marcas discretas y que, de repente, a tus 34 castañas, mejores 3 segundos en un 1.500 y de paso ganes un Campeonato de Europa es, cuanto menos, llamativo.