lunes, 9 de abril de 2012

A vueltas con el tapering

Esto de leer blogs de otros runners hace que aprendas conceptos nuevos o, por lo menos, palabras nuevas. El otro día, leyendo el blog de "Motivación Runner"“ la palabra “tapering”. Anteayer también lo volví a leer en el de "La Pingüina veloz". Cateto de mí, pensé en dos posibles significados:

  • Acción y efecto de ir de tapas, o “tapeo”. Podría ser, ya que tenemos el “vending” para las máquinas de venta de cualquier cosa o el ya histórico “puenting” para tirarse de un puente atado de una cuerdecita ¿por qué no?-
  • Acción y efecto de llevarse el “tupper” o “táper” al curro para comer allí y ahorrarse los 9 ó 10 pavos del menú del día. Vamos, el bocata de siempre pero envuelto en un táper encajable en una cestita de diseño en lugar del menos glamuroso papel de periódico o aluminio, modelo obra.

Pues no. Gracias a Manuel y Yolanda me he enterado que la reducción en la carga de los entrenamientos tiene un nombre, “tapering”. Una vez leído el término me fui al sancta santorum, Google, para ver qué coño era eso del tapering, encontrando estos artículos:



En los planes de entrenamiento había visto que en los 2 ó 3 últimas semanas (sobre todo en la última) la carga se iba reduciendo de forma progresiva. Instintivamente pensé que podía deberse a que con esta reducción se trataba de ir minimizando el riesgo de lesión después de estar 10-12 semanas de trabajo intenso. Hablando en plata, para no cagarla por hacer dos kilómetros de más. Al fin y al cabo, por correr 3 ó 4 kilómetros más la última semana no va a mejorar nuestro umbral anaeróbico y sí que nos puede joder bastante en forma de contractura o sobrecarga.

¿Y qué tal mi fase de “tapering”? Bueno, hace un par de semanas hice tres salidas bastante tranquilas (salvo una, a 4:38 aún flipado por la media de Segovia, las otras dos a una media de 5km). El rodaje del domingo, de sólo 18 kms, lo hice a 5:19, y 135ppm, el 80% de mi FCMáx. Con esta media, mi tiempo final en MAPOMA estaría en 3:45. A este ritmo me encontraba bastante cómodo, aunque extrapolarlo a 24 kilómetros más pueda resultar aventurado. 3:50 quizás sea más realista (8 segundos más por kilómetro de “colchón”).

La semana pasada salí un par de veces, batiendo mi récord en una salida de 10 kms, a 4:28, y eso que quería ir tranquilo precisamente por el tapering. Pero ya se sabe, dos kilómetros iniciales buenos y, qué coño, “ligero como una moto, potente como un camión”, como dice Pelayo. Me imagino que influyó la situación pre-borrascosa (menor presión atmosférica), ya que llevo varias salidas a umbrales anaeróbicos a 4:31 (28 de Febrero), 4:32 (22 de Marzo), 4:35 (5, 8 y 13 de Marzo). Son “sólo” un par de segundos, pero al final lo que queda es que uno corre a “cuantro veintipico” en lugar de “cuatro-treintaypico”. No es lo mismo, no señor. ¿Y el rodaje? bien, muy bien, sólo quince kilómetros por Córdoba pero que me supieron a gloria, haciendo honor al día la Semana Santa en el que lo corrí y del que me explaré en el siguiente post.

5 comentarios:

  1. Joder cuanta teoria, creo que me quedo con el tapering de patatas bravas con un buen tinto de verano...q yo sin gaseosa no soy nadie!!

    A por ese Mapoma colega!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. je, je...cuidado con la casera q se tu sube a la cabeza

      Eliminar
    2. Ya me gustaría a mí quedarme con ese tapering, Javier,...Thunder,...Eres un maestro!

      Eliminar
  2. Pues te ha quedado chulo tu primer "taper"... ¿te lo cambio por el mio?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. tus entrenos los cambio con los ojos cerrados, tan metódicos dan miedo ;)

      Eliminar